Las formaciones critican que el Servicio Público de Empleo asume el pago de prestaciones mientras el banco obtiene beneficios crecientes. El incremento de un 500% en los beneficios de Liberbank no ha pasado desapercibido a los sindicatos que no firmaron el expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), que aprovechan para solicitar la retirada de este ajuste y recuerdan que el banco surgido de la fusión de Cajastur (CCM), Caja Cantabria y Caja Extremadura está haciendo uso recursos del erario público merced a él.
La sección sindical de CSICA en Liberbank ha sido la primera en solicitar la retirada del actual ERTE en vigor y la reposición de las condiciones laborales de los trabajadores afectados. En un comunicado, el sindicato critica las dos varas de medir que utiliza Liberbank. “Por un lado, de cara al exterior sigue sacando pecho resaltando la bonanza de la entidad, mientras que, por otro, internamente, sigue maltratando a los trabajadores al aplicar sobre los mismos las medidas más duras y salvajes del sector”, denuncia.
“Frente a las cifras que presenta Liberbank, no podemos callar, ni silenciar, el oprobio que significa que una entidad cotizada en Bolsa, como Liberbank, con una solvencia por encima de la media, y con unos ratios de liquidez y de morosidad mejores que los de sus competidores, mantenga vigente un ERTE bestial a sus trabajadores nada menos que hasta junio de 2017”, señala la formación.
Además, el sindicato califica de “inadmisible” que el banco “siga aún obteniendo recursos del erario público”, primero tras el plan de saneamiento, y en estos momentos, merced a las medidas de reducción de jornada y salario aplicadas a la plantilla.
“Esta pésima praxis de Liberbank, supone un atentado contra los derechos de los trabajadores y del Estado, dado que el coste que el banco se ahorra en sueldos y cotizaciones desde 2013, lo estamos pagando los empleados y el conjunto de los contribuyentes”, destaca el sindicato, que considera que supone además, “atentar contra las reglas de libre competencia instauradas en la Unión Europea”.
En términos similares se expresa otro de los sindicatos que no firmó el ERTE, Apecasyc, que destaca en otro comunicado que “una vez que la entidad se ha comprometido a la resolución de litigios pendientes con algunos clientes”, recuerda que la plantilla ha venido pagando permanentemente durante el año 2014 y por culpa de un ERE que otros firmaron con la dirección, una suma que ronda los 100 millones de euros.
Por ello, y una vez superada una situación “puntual y coyuntural” que a su juicio “en nada se parece a la actual”, Apecasyc llama a “retornar de inmediato al personal desplazado en virtud de la reestructuración sufrida, a la anulación de un ERE inexplicable y a asumir, desde la empresa, las remuneraciones de su plantilla, sin hacer recaer en el Servicio Público de Empleo el pago de prestaciones mientras se obtienen beneficios crecientes y se habla de abonar dividendos a los inversores”.
