La concejala del PP en el Ayuntamiento de Madrid se sincera en un almuerzo informal ante un grupo de periodistas del corazón. Pocas semanas después de presentar su dimisión como presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre compartió mesa y mantel con la peña periodística ‘Cuarto Poder’ en el restaurante madrileño Casa Lucio. Durante este almuerzo informal, la concejala en el Ayuntamiento de la capital comentó algunos aspectos de su vida privada pero también su opinión personal sobre adversarios políticos como Manuela Carmena.
Sobre la alcaldesa de Madrid, Aguirre cree que no tiene ningún sentido del humor, lo contrario que Mariano Rajoy, que -asegura- sí lo tiene. “Debería tener más, para enfocar la vida de otra manera. Lo que sí tiene es gran cordialidad en el trato”, señaló la concejal según relata en Libertad Digital Carlos Pérez Gimeno, uno de los periodistas presentes en la comida.
Preguntada sobre su faceta más familiar y posibles renuncias que ha asumido por su carrera política, Aguirre comenta que “la política no me ha robado mucho de poder disfrutar de mis hijos y mi marido cuando eran pequeños, y si esto en alguna ocasión ha ocurrido, Fernando me ha suplido perfectamente”.
Lleva 40 años casada con Fernando Ramírez de Haro, con quien reconoce que ha pasado “crisis importantes”. “Que yo recuerde tres. Hay veces que se superan y otras no. En nuestro caso el equilibrio es positivo. Lo que nunca puedes hacer es confiarte”, explica Aguirre, según cuenta Paloma Barrientos en el portal Vanitatis.
Los periodistas que asistieron al almuerzo también cuestionaron a la expresidenta madrileña sobre la pareja de moda: Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa, con quienes mantiene una amistad desde hace años. Aguirre afirma al respecto que “Isabel se lo merece” tras su dedicación total a Miguel Boyer durante sus últimos tres años. Pero aclara que también es amiga de Patricia, la exmujer del escritor a quien mandó un mensaje para decirle que sentía la ruptura matrimonial.
