El fabricante original de este material lo ha renovado por una versión mejorada y más económica, pero cuyas burbujas no estallan con la presión. Tendremos que empezar a decir adiós a un gran placer: explotar el plástico de burbujas. Según informa The Wall Street Journal, Sealed Air, el fabricante original de Bubble Wrap (como se llama a este tipo de plástico) desde 1960, ha decidido renovar con un nuevo material, muy parecido, más barato y más cómodo, pero con una gran diferencia: las burbujas no estallan con la presión.
Como explica el periódico estadounidense, el iBubble Wrap, el nuevo plástico de embalaje, se venderá en capas lisas, que el usuario inflará con una bomba especial para empaquetar lo que desee. Al inflarlo, no se forman burbujas individuales, propiamente dichas, sino cámaras de aire conectadas. Al presionar en una, el aire pasa a las contiguas en lugar de explotar.
En principio, el plástico de burbujas que todos conocemos no desaparecerá del todo, pero al resultar más barato y cómodo para los comerciantes, especialmente para compañías como Amazon (ocupa mucho menos), se espera que sea la opción más elegida. Y, por tanto, la versión original quedará relegada.
El Bubble Wrap ocupa un espacio valioso en los camiones de reparto y en los pisos de almacén de los clientes, apunta el diario, mientras que un rollo del nuevo Wrap iBubble ocupa cinco veces menos antes de inflarse.
De esta manera, Sealed Air pretende reflotar el uso de estos plásticos para el embalaje, que en los últimos años se han visto desplazados por otros materiales.
