Las autoridades bancarias cubanas, con la billetera prácticamente vacía para otros menesteres, se han presentado ante el Club de París para honrar su compromiso con tanta gente rica y desembolsarles 2.600 millones de dólares con unos 20 días de anticipación a la fecha acordada.
Con ello queda por sentado la seriedad y compromiso ante esa institución que ya en su momento exoneró a la isla del pago de unos 8.500 millones.
Cuba no está en su mejor momento y paga. Los vaivenes con el petróleo venezolano, la insuficiente exportación, el huracán Irma, la vuelta a las tensiones con EEUU y la poca afluencia del turismo de ese país brindan un panorama para nada alentador.
Este pago ha representado que aún se le sigue debiendo mucho dinero a empresas extranjeras radicadas en la isla, que con extrema paciencia deberán continuar esperando sus honorarios mercantiles por todo lo que han vendido y aún no está cobrado.
Aun así, la Asociación de Empresarios Españoles en Cuba (AECC) comenzó desde este domingo una campaña de recaudación de fondos para los damnificados del huracán Irma. Y si no lo hizo antes fue por la demora de las autoridades cubanas en abrir una cuenta en euros, cuyo primer aporte fue el mil, precisamente de esta Asociación que agrupa a unas 260 empresas en la isla.