La residencia pública de gestión privada Moscatelares ha acumulado en los últimos meses numerosas críticas de trabajadores y denuncias de familiares de los usuarios. “La valoración es positiva”. De esta manera, la Comunidad de Madrid ha respondido a la pregunta del diputado de Podemos Raúl Camargo sobre qué opina de la situación en la residencia pública de gestión privada Moscatelares. Y es que en los últimos meses, este centro ha copado varios titulares ya sea por las denuncias por maltrato o por las movilizaciones de sus trabajadores por la el camino que está llevando la empresa gestora.
En febrero de 2016, la izquierda de San Sebastián de los Reyes -lugar donde está ubicada la residencia- ya denunció las malas condiciones en las que supuestamente se encontraban los residentes debido a los recortes que la compañía Albertia implantó cuando se hizo con la gestión. Unas advertencias que recogieron a raíz de testimonios de profesionales del centro que alertaban, como recogió la Cadena SER, de rebajas en la calidad y cantidad de las comidas y del incremento de la carga de trabajo excesiva que les impide atender sanitaria y humanamente a las personas mayores. Una afirmación que complementaron los familiares de los usuarios.
Con el paso del año, las informaciones no se detuvieron. A finales de agosto, el hijo de una residente de 87 años llegó a denunciar ante la policía el trato que la concesionaria había dado a su madre. La publicación de la Cadena SER apuntaba a que la anciana recibió un golpe y le tuvieron que poner 13 puntos de sutura en una pierna. “La residencia ha funcionado correctamente hasta hace año y medio, momento en el que empezaron a producirse los malos tratos y que coincide con el inicio de la gestión de la empresa Albertia”, recalcó el denunciante en su escrito.
Acto seguido, con la llegada de septiembre, los trabajadores y familiares de la Residencia Geriátrica Moscatelares de San Sebastián de los Reyes decidieron concentrarse frente a la propia residencia por la situación que pasaba el centro. De hecho, las denuncias no se frenaron: otra hija de una residente aseveró que acudió a visitar a su madre y la encontró “balbuceando y caída de un lado”. Unas escenas que una trabajadora de la residencia durante seis años valoró asegurando, en una carta que envió al director antes de trasladarse a otro centro de trabajo a la que tuvo acceso el medio de Prisa, que “ninguno traería a su propio familiar a una institución como esta” cuya finalidad “es ganar dinero”.
El choque en el Parlamento madrileño
Un conflicto que llegó a la Asamblea de Madrid cuando varias trabajadoras de la residencia llegaron a ser desalojadas de la tribuna de invitadas tras pedir la dimisión del consejero de Políticas Sociales y Familia, Carlos Izquierdo, por lo que estaba sucediendo en el centro. “Por la dignidad de nuestros mayores no a los recortes de Albertia”, se podía leer en las camisetas que portaban las profesionales.
Ante estos episodios, la Comunidad de Madrid, en el mismo pleno donde hubo la protesta, mantuvo el camino de los últimos meses defendiendo la gestión. “Es lógico y normal que existan problemas puntuales”, manifestó el consejero después de aseverar que Madrid es la única región que inspecciona las residencias dos veces al año.
A pesar de esta afirmación de que las inspecciones han resultado favorables para los intereses de la compañía gestora, la respuesta no encontró satisfacción por parte del diputado de Podemos. Camargo, en el mencionado pleno, recordó que los estudios que se realizaron en la residencia no pasaban por alto las “habitaciones sin puerta en el armario, manchas de humedad en el techo, denuncias sobre prótesis mal puestas, el desayuno tenía que estar puesto a las nueve y media y a las diez menos veinte no había todavía ni una sola taza en el comedor cero de la residencia Moscatelares”, así como otras deficiencias de la gestión de una empresa que, a su entender, “explota y humilla a las trabajadoras”.
El problema llega para el parlamentario al ver la reacción de la Comunidad de Madrid ante una inspección propia: “¿Cuál ha sido el resultado que han hecho ustedes? Nada, cero, decir que Albertia funciona fenomenal y que hay un sindicato, que es un sindicato de pistoleros que está denunciando a trabajadores y a trabajadoras que denuncian situaciones de explotación laboral, y usted dice que son la representación y que todo allí es magnífico”.
Una defensa que ha vuelto a mantener el Gobierno de Cristina Cifuentes ante las preguntas que no se han disuelto en la oposición. “La valoración es positiva, atendiendo a la satisfacción de los usuarios, las propias manifestaciones de los trabajadores del centro, el grado de implicación de los diferentes profesionales que componen el equipo de atención a las personas mayores y la implicación de la empresa gestora”, ha zanjado la Comunidad de Madrid en una respuesta escrita publicada este jueves por el Boletín Oficial de la Asamblea de Madrid.
